Eres, María

 

Padre Javier Leoz

 

Eres, María;
delicadeza en la dureza
delicadeza cuando asoman las pruebas
delicadeza cuando llama Dios
delicadeza cuando te llaman los hombres.

Eres, María;
delicadeza en el trato con Dios
delicadeza con las necesidades de los hombres.

Eres, María;
delicadeza para embellecer nuestra fe
delicadeza para profundizar en nuestra oración
delicadeza que nos ayuda en la Eucaristía
delicadeza para escuchar la Palabra de Dios.

Eres, María;
flor delicada y cortada para Dios
flor con aroma de servicio
flor sin miedo a la espina de dolor
flor que, cuanto más se aprieta, más fragancia ofrece.

Eres, María;
delicadeza que se compromete
delicadeza que sabe darse
delicadeza que sabe respetar
delicadeza que sabe amar.

Eres, María;
un jardín donde crece la flor del gusto
tal vez, por eso mismo,
no quiso pasar de largo.

Amén.