María Te suplico, Virgen Santa, que yo reciba a Jesús de aquel Espíritu de quien tú engendraste a Jesús.
Que mi alma reciba a Jesús con aquel Espíritu
por el cual tu carne recibió al mismo Jesús.
Que me sea posible conocer a Jesús por aquel Espíritu por quien te fue posible a ti conocer y dar a luz a Jesús.
Que yo exprese conceptos humildes y elevados a Jesús en aquel Espíritu en quien tú confiesas ser la esclava del Señor.
Que ame a Jesús en aquel Espíritu en quien tú lo adoras como Señor y lo contemplas como Hijo.