Virgen de Fátima 

 

 

Autor:

 

 

- Reina y Señora nuestra, que habiéndole pedido a Ti los pastorcillos de Fátima la salud para algunos enfermos, respondisteis que algunos curarías y otros no, enseñándonos que las enfermedades son a veces un don precioso de Dios y un medio de salvación: alcánzanos la resignación cristiana en las contrariedades corporales que Dios se digna enviarnos y haced que siempre bendigamos al Señor que nos protege de esa manera, enviándonos un medio para pagar a la Divina Justicia las penas temporales que hemos merecido por nuestros pecados.

Amén