Jornada de las gentes del mar.

Animar la fe de las gentes del mar.

+ Antonio Ceballos Atienza. Obispo de Cádiz y Ceuta

Mis queridos diocesanos:

Como todos los años ante la proximidad de la fiesta de Nuestra Señora, la Virgen del Carmen, os saludo con cariño, os felicito y rezo por vosotros.

1. Animar la fe de las gentes del mar

El lema de este año es el siguiente: Animar la fe de las gentes del mar. Este lema es muy apropiado, dado que yo mismo soy testigo, en el trato que tengo con vosotros en las Visitas Pastorales, de la fe y el entusiasmo que profesáis las gentes del mar a la Virgen del Carmen. Es la fe viva que da fortaleza a vuestras vidas y os hace protagonistas de verdaderos actos heroicos y de escalofriantes testimonios.

2. Largas jornadas y frecuentes ausencias

Nuestra Diócesis de Cádiz y Ceuta es una Diócesis eminentemente costera. En todo este inmenso y variado mundo del mar, lo más importante y lo que más debe interesarnos son las personas que trabajan y viven del mar, que viven en él o sufren las consecuencias de su duro y arriesgado trabajo, a veces acompañado de muerte y sus derivados de viudedad y orfandad. Es un trabajo de largas jornadas y de continuadas y frecuentes ausencias.

3. La familia marinera

La Iglesia quiere que, en el entorno de la fiesta de Nuestra Señora del Carmen, Patrona de los hombres del mar, de las familias, de las profesiones y de las poblaciones marineras, celebremos una Jornada dedicada especialmente a este complejo mundo del mar en su parte más humana, las personas y las familias del mar.

Hay que comenzar en este día y siempre por tomar conciencia de la existencia de este importante mundo de la familia marinera, tanto del sector de la marina mercante como del de la pesca; de su especial problemática, de su campo de trabajo, que es el mar, a veces tan maltratado por los de la tierra y con frecuencia escenario de confrontaciones.

4. Apoyar las justas reivindicaciones

Hemos de apoyar las justas reivindicaciones de las personas que viven del mar, tanto en lo que se refiere a sus condiciones de trabajo y sus prolongadas ausencias y largas separaciones de la familia, como en sus exigencias de que se respete el mar como lugar de trabajo, fuente de recursos para las personas y futuras generaciones, vía de comunicación entre los pueblos y de transporte de personas, mercancías y recursos.

5. Relación especial con el Señor y los pescadores

El Papa Benedicto XVI muy acertadamente, en su reciente visita a la isla de Malta, decía: Más que cualquier bagaje que podamos llevar con nosotros - logros humanos, posesiones, tecnología - lo que nos da la clave de nuestra felicidad y realización humana es nuestra relación con el Señor. Él nos llama a una relación de amor. Esta relación de fe y de amor con el Señor, nos dará la fortaleza necesaria para afrontar la crisis económica, moral y de paro que padecemos.

6. Servicios especiales para atender las gentes del mar

La Iglesia se ocupa especialmente de los hombres y las mujeres del mar por medio de las parroquias marineras por los servicios especiales de Apostolado del mar, como son las instalaciones de las Stella Maris en los puertos, los servicios de capellanes y de trabajadores sociales a bordo, el trabajo con familias de marineros y pescadores, el apoyo a sus justas reivindicaciones, etc. De este modo la Iglesia hace presente la cercanía del Señor, que tuvo una relación especial con los pescadores de su tiempo, especialmente con los apóstoles que tenían esta profesión, y que desarrolló una buena parte de su actividad evangelizadora en el lago de Galilea o en sus orillas y litorales.

7. Oración sentida y ferviente

En este día de la Virgen del Carmen y las gentes del mar, os invito a elevar una fervorosa y sentida oración por todas las personas relacionadas con el mar, especialmente los marineros y pescadores, por sus familias y por todos los trabajadores del mar y de los puertos.

Con fe y entusiasmo cantemos ahora y siempre: Salve, Estrella de los mares.... ¡Mira a la Estrella, invoquemos y miremos a María!

Reza por vosotros, os quiere y bendice,

+ Antonio Ceballos Atienza
Obispo de Cádiz y Ceuta

Cádiz, 12 de julio de 2010.