Solemnidad de Nuestra Señora de la Almuneda

+ Antonio María Rouco Varela, Cardenal-Arzobispo de Madrid

 

Homilía

9 de Noviembre de 1999
A Ella, a quien le dedicamos este día, en el que su Catedral luce las nuevas muestras de la devoción y amor de sus madrileños, en el que se ha renovado fielmente el Voto multisecular de su Consejo, le queremos decir, confiándonos a su cuidado maternal, con palabras de Juan Pablo II en la Bula de Convocación del Gran Jubileo del Año 2000: "Que ella, que con su hijo Jesús y su esposo José peregrinó hacia el templo santo de Dios, proteja el camino de todos los peregrinos -incluidos todos los fieles y ciudadanos de Madrid- en este año jubilar. Que interceda con especial intensidad a favor del Pueblo cristiano durante los próximos meses, para que obtenga la abundancia de gracia y misericordia, a la vez que se alegra por los dos mil años transcurridos desde el nacimiento de su Salvador" (InMys 14). Quiera la Virgen de La Almudena que el próximo año, el Dos Mil del Nacimiento de Nuestro Señor Jesucristo, sea en Madrid "Un Año de Alabanza, de Perdón y de Acción de Gracias" (Cfr. Propuestas Pastorales para el Año Jubilar 2000 de la Archidiócesis de Madrid). 

"Que la Iglesia -con especial verdad y fervor en Madrid- alabe a Dios Padre en el Espíritu Santo por el don de la salvación en Cristo Señor, ahora y siempre" (InMys 14).

Madrid, 9 de Noviembre de 1999

Fuente: Arquidiócesis de Madrid