Dogma de la Inmaculada Concepcíon

Germán Frías García

 

María es la primera criatura redimida por los méritos de Cristo y esto asido de un modo eminente en atención ha su hijo Jesucristo, quien ya la había elegido desde antes de su concepción, Cristo le da toda su Santidad. 

“A lo largo de los siglos, la Iglesia ha tomado conciencia de que María “llena de gracia” por Dios ha sido redimida desde su concepción, siendo así que el dogma es proclamado en el año de 1854 por el Papa Pío IX con la Bula Ineffabilis Deus:
“Declaramos, pronunciamos y definimos que la doctrina que sostiene que la Santísima Virgen María, en el primer instante de su concepción, fue por singular gracia y privilegio de Dios omnipotente en previsión de los méritos de Cristo Jesús, Salvador del genero humano, preservada inmune de toda mancha de culpa original, ha sido revelada por Dios, por tanto, debe ser firme y constantemente creída por todos los fieles.” (Cf. CIC 491) 

El 8 de diciembre celebramos en la Iglesia universal, el ciento cincuenta aniversario de la proclamación del dogma de la Inmaculada Concepción. Una fecha de suyo importante, pero sobre todo para los fieles de la Diócesis de Celaya, quienes se han encomendado a María Santísima en está advocación. En el Seminario nos preparamos también para esta importante fecha pues nuestra institución están bajo la protección de la Inmaculada. 
Y por eso quisiéramos que supieras algunas cosas sobre el Dogma de la Inmaculada Concepción.

Hay muchos privilegios que Dios a otorgado a María Santísima entre estos nos encontramos con el dogma de la Inmaculada Concepción, que hay que entender no como el estado virginal en el cual concibió a Jesús(Lc. 1, 31-34) si no como la concepción de María en el seno de su madre, quien Dios preservo del pecado original. Es decir el pecado que se trasmite desde nuestro nacimiento y donde Dios intervino para resguardar a María de esta transmisión que sea dado desde nuestros primeros padres Adán y Eva por su desobediencia a Dios, y que uno de los beneficios del Bautismo es purificarnos de este pecado.

Este misterio es lo que celebramos los cristianos, con este dogma. “Los Padres de la tradición oriental llaman a la madre de Dios la Toda Santa, la celebran como inmune de toda mancha de pecado y como plasmada y hecha una nueva criatura por el Espíritu Santo. Por la gracia de Dios, María ha permanecido pura de todo pecado personal a lo largo de toda su vida”. (CIC 493)“
Pero no podemos decir que esta fiesta comienza con la proclamación del Dogma; pues ya desde antes se sentía entre el pueblo este espíritu inmaculista. 

Contamos con una larga tradición popular acerca de la inmaculada. La primera es el evangelio apócrifo de Santiago, que cuenta como, Santa Ana concibió a María sin varón, sabemos que solo es un relato popular sin fundamento histórico, pero que a través de este podemos notar como la gente del pueblo celebraba algo que para ellos era muy coherente; que la Madre de Dios no tuviera ningún pecado. Fue así como laa poco, que dentro de las jerarquías de la Iglesia comenzaran a reflexionar sobre este misterio. 
Es así que el Papa Sixto IV (1478-1483) apruebe el oficio y la fiesta y el Papa Clemente XI en el año de 1708 extiende la fiesta de la Inmaculada a la Iglesia Universal sin ser todavía Dogma de Fe. 

Pero no todo fue siempre dulzura entre los teólogos, hubo algunas dificultades ya para proclamar el dogma, el primer obstáculo que se encontró fue el de la universalidad del pecado. ¿Cómo explicar la excepción herética en la herencia del pecado original que todos recibimos y en la necesidad que todos tenemos de ser redimidos? El Concilio Vaticano II nos dice después de una larga tradición de discusiones teológicas, sobre la Inmaculada Concepción de Maria, “ 

Efectivamente la Virgen María, que al anuncio del ángel recibió al verbo de Dios en su alma y en su cuerpo y dio la vida al mundo, es reconocida y venerada como la verdadera Madre de Dios y del redentor. Redimida de modo eminente, en previsión de los méritos de su hijo, y unida a Él como un vínculo estrecho e indisoluble, está enriquecida con la suma prerrogativa y dignidad de ser Madre de Dios Hijo, y por eso Hija predilecta del Padre y Sagrario del Espíritu Santo; con el Don de su gracia tan extraordinaria aventaja con creces a todas las otras criaturas, celestiales y terrenas”( Cf. LG 53)

Es decir, María es la primera criatura redimida por los méritos de Cristo y esto asido de un modo eminente en atención ha su hijo Jesucristo, quien ya la había elegido desde antes de su concepción, Cristo le da toda su Santidad. 
Pero no solamente los doentos del concilio nos hablan de la Inmaculada Concepción , si no que también tenemos nuestra fuente en la Sagrada Escritura. Veamos que dice Gen 3, 15 “pondré enemistad entre ti y la mujer, entre su descendencia y tuya” es el famoso texto llamado Protoevangelio por ser el primer anuncio de la Buena Noticia, es decir de la redención futura.

Este pasaje nos muestra como no hay consonancia entre el bien y el mal, la mujer y su descendencia luchan, contra la serpiente; entendemos esto como la mujer que nunca puede estar con la serpiente (demonio) el maligno nunca la va a poseer. 

El otro pasaje Lc. 1, 28 “llena de gracia” Dios se ha desbordado con ella en darle sus gracias y solo alguien puro puede estar lleno de la gracia de Dios, y de sus infinitos dones. La llena de gracia no es gratuito, en pos de una misión, la de ser la Madre del redentor y Madre nuestra. Claro todo esto, María lo acepta libremente y por amor a Dios. De esta manera tenemos que venerar con amor, este increíble misterio.

¡ Alabada sea la Inmaculada Concepción de Maria!"