Qué frías son las escarchas 

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¡Qué frías son las escarchas!,
¡qué frías son las escarchas,
que no las calienta el sol,
que no las calienta el sol!. 
Llegó san José y la Virgen
a la puerta del mesón.
La mesonera en la cama
el mesonero salió. 

-Digan pronto lo que quieren
que no hace calor, por Dios. 

-Traigo a María muy mala
a mi esposa y a mi amor,
muy mala viene y quisiera
meterla en mi corazón. 

Respondió la mesonera
desde la casa enfadad:
- A alborotar el mesón
viene sl viejo con su dama. 
Más valiera que estuviera
recogida en su aposento
y no venir a estas horas
en compañía de un viejo. 
La Virgen que esto ha oído
ha comenzado a llorar
y San José le decía:
- No llores que hay un portal. 

en el portal de Belén
al Niño nos dio María.
Y era tanta la pobreza
que ni pañales tenía. 

Echó mano a la cabeza
a una toca que traía,
la partió por la mitad
y al Niño Dios envolvía
y al Niño de Dios revestía.

Fuente: Piornal.net