¡Madrecita, Madre! 
¡Madre, Madrecita! 

 

Padre Juan Morera Peralta

 

 

Con nubes sin nubes, 
madre, madrecita... 
cuando yo no era... 
y tú me sentías; 
cuando me soñabas; 
cuando yo crecía; 
cuando sin saberlo 
todos lo sabían; 
cuando yo no era... 
y tú disponías; 
cuando dilatabas 
caderas, barriga; 
con ojos nublados 
náuseas sentías; 
abultabas mamas 
con la leche tibia; 
cuando, madre...cuando 
cuando cada día 
eras más matrona; 
era yo más vida; 
tus manos febriles 
tejían, tejían. 
Tú soñando cielos 
en la canastilla. 
Yo acurrucadito. 
Tú dilatadita. 
Tú sembrando flores. 
Yo azares vertía (¡!) 
Tus mimos, esencias, 
desvelos, caricias. 
Todo era sorpresa. 
Todo maravilla. 
...¿Por si nace niño? 
...¿Por si nace niña? 
Todo lo ordenabas. 
Todo lo ponías. 
Si naciere niño...! 
Si naciere niña...! 
Todo era esperanza. 
Los llantos, caricia. 
Antes que naciera... 
Tú ya lo fingías... 
...Era todo, canto, 
mérito, energía. 
...Era yo el modelo 
cual tú describías 
junto al padre grave 
que nos presidía... 
Cuando las estrellas 
de noche lucían... 
era yo aquel brillo 
con que tú lucías. 
Cuando el firmamento 
brillaba de día... 
era yo tu héroe, 
tú mi hada madrina. 
Cuando te inquietaba, 
y cuando gemías, 
era yo un tesoro, 
y tú mi heroína. 

¡Madre! ¡Madre! ¡Madre! 
¿...Ya lo presentías? 
¡Madrecita, madre! 
¡Madre, madrecita! 
Hoy tú eres mi sueño. 
Sea yo tu dicha. 
Mientras seas joven; 
cuando viejecita; 
siempre serás, madre, 
¡Tan buena! ¡Tan linda...! 
¡Madre, madre bella...! 
¡Tan bella y sufrida...! 
Madrecita, madre 
por toda la vida... 

¡Qué pena tan grande 
madre, madrecita, 
la del niño huérfano; 
de la huerfanita... 
la del abortado; 
la de la abortiva, 
sin poder gritarte 
ni cantar: "Mamita"!!! 
Que Dios nos proteja. 
Que Dios nos bendiga. 
Que Dios, nos ampare. 
¡Oh Virgen María...!