Patrona de los cubanos

 

Daisy Casañas de García

 

 

Ocho de septiembre es
una fecha religiosa
para Cuba milagrosa
e inigualable tal vez.
Todos desde la niñez
llevamos en la memoria
esa página de gloria;
por eso en la eternidad
Virgen de la Caridad
tú vives en nuestra historia

En la provincia de Oriente
en una hermosa bahía,
a tres náufragos un día
salvó milagrosamente,
por eso el cubano siente
Virgen de la Caridad
la urgente necesidad
de un milagro celestial
librando a Cuba del mal
que oprime su libertad.

Virgen de la Caridad
¡cuántos milagros tú has hecho!
Cuando a un enfermo a su lecho
le has llevado tu bondad.
Cuando la fatalidad
un ser querido nos quita
ante tu imagen bendita
de rodillas nos postramos
y por su alma rogamos
mi adorada Virgencita.
Virgen de la Caridad
¡cuántos has visto sufrir
cuántas personas morir
por cualquier enfermedad,
cuánto horror, cuánta maldad
que nos angustia y aterra
cuánta destrucción y guerra
todos estamos viviendo!
Por eso a ti estoy pidiendo
que salves a nuestra tierra.

Virgen de la Caridad
Patrona de los cubanos
ayuda a nuestros hermanos
que no tienen libertad.
Haz que tu inmensa bondad
llegue a cada corazón,
que la desesperación
se convierta en alegría
salvando a la patria mía
del terror y la opresión.

Con toda el alma te pido
hoy de todo corazón
que a mi cubana nación
no eches en el olvido,
que a ese pueblo tan sufrido
lleves la felicidad,
Virgen de la Caridad,
mi Virgencita del Cobre
haz que mi Cuba recobre
la perdida libertad.