Tonada a María

Rafael Ángel Marañón 

 

A ti que fuiste madre del ser hombre y divino
Levanto esta tonada para satisfacer
Mi luengo amor que quiere con ello enaltecer
Tu nítida pureza que trajo al gran rabino.

Maestro poderoso, divina humanidad
Que tú, Madre, llevaste, que Dios, enalteció,
Formando el santo ser que a todos nos salvó,
Llevando en su persona grandeza y humildad.

Fue bueno, fue obediente en su infantil vivir,
Y ungido por su Padre, llegó a morir de amor.
Y tú María, benigna, mas plena de dolor,
Al hijo lo entregaste, por tu pacto cumplir.

Sufriste silenciosa, colmada de pavor
Sayones que a Jesús laceran inclementes
Las burlas de los grandes, y de los indigentes,
Que algunas horas antes honraron en loor.