Emails a María

 

Padre Felipe Santos Campaña SDB

 

 

 

Asunto: Madre y esposa

María, madre y esposa:Sé que fuiste una esposa especial porque Dios te eligió para ser la madre de su Hijo, pero José, ante aquella cultura, fue tu esposo virgen para defenderte y cuidarte de los chismes de la gente al verte embarazada sin que supieran que había sido por obra divina.
Ya la luz de esa imagen, hoy te envío un e-mail sobre el matrimonio. Me preocupa el repetido fracaso del amor en muchos de mis amigos que ven cómo, de pronto, se quiebra el tallo del afecto que en otros tiempos esperaban que floreciera en destellos de gozosa felicidad. Sólo cuando somos capaces de amar “desinteresadamente”, es cuando somos amados de verdad. Hace falta un cielo nuevo y una tierra nueva con la dinámica del amor auténtico y no del sólo sexo como motor de la vida matrimonial que, tarde o más pronto de la cuenta, tiende a ajarse o fenecer o morir. El amor profundo está por encima de los avatares, cambios, gustos e intereses. Y no conviene que esté supeditado a sentimientos más o menos “pasajeros”. Las convicciones “maduradas” fortifican los afectos sinceros y les dan estabilidad. Luego la causa de tantos fracasos...Madre, ayuda a los matrimonios.

Fuente: autorescatolicos.org