Orar con María, Orar a María

María abandono en Dios

 

Fray Martín Irure, ofmcap.

 

Ambientación

   El evangelista Lucas, al relatar la escena de la Anunciación, subraya la respuesta de María, resumida en la expresión: “Aquí está la esclava del Señor, que me suceda como tú dices”. Esta frase es un reflejo de su actitud interior y profunda. María se entregó, sin reservas y para toda su vida, en las manos de Dios.

Lectura de la Palabra (Lc 1, 35-38)

El ángel le contestó a María:
- El Espíritu Santo vendrá sobre ti y el poder del
Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso,, el que va a nacer será santo y se llamará Hijo de Dios. Mira, tu pariente Isabel también ha concebido un hijo en su vejez, y ya está de seis meses la que todos tenían por estéril; porque para Dios nada hay imposible.
María dijo:
- Aquí está la esclava del Señor, que me suceda como tú dices.
Y el ángel la dejó.


Reflexión

A Dios hay que responderle con la obediencia de la fe.
Por ella, el hombre confía, libre y totalmente, en Dios.
Este modo de entender la fe encuentra en María su realización perfecta.

“Dichosa tú que has creído”, la saludó Isabel.
En la Anunciación, María se abandona en Dios, completamente y para siempre.
En el Señor descarga el entendimiento y la voluntad.
Responde con todo su “yo” humano, femenino.

Su respuesta de fe conlleva una cooperación perfecta,
una disponibilidad total a la acción del Espíritu.

Esta actitud de María, el abandono total en Dios, hace el milagro:
Dios hecho hombre. El Eterno se hace temporal.
El que no tiene historia entra en la historia humana.
Gracias a la disponibilidad de esta pequeña joven de Nazaret.

“Que me suceda como tú dices”. Hágase en mí, hágase en mí según lo que te parezca bien.
¡Hágase tu voluntad. Hágase!
María decide, acepta y se entrega al plan de Dios sobre sí misma y sobre la humanidad.


Revisión de vida

- ¿Cómo nos comportamos ante la voluntad de Dios?
¿Intentamos descubrirla en nosotros? ¿Cómo? ¿En qué signos?
- ¿Hacemos oración, consultamos, leemos la Escritura, para conocer el plan de Dios?
- ¿Pedimos al Señor que nuestra conducta esté conforme a su voluntad?

Oremos al Señor

Escúchanos, Padre...

- Para que como María seamos dóciles al plan de Dios en nosotros. Oremos.
- Para que como María colaboremos con el Señor para salvar a todos. Oremos.
- Para que como María nuestras obras estén de acuerdo con su voluntad. Oremos.

Señor, que los dones que hemos recibido nos otorguen siempre tu misericordia,
y, por la encarnación de tu Hijo Jesucristo, salva a los que veneramos fielmente
la memoria de su Madre, la Virgen María.