Orar con María, Orar a María

María de la esperanza

 

Fray Martín Irure, ofmcap.

 

Ambientación

María es modelo, ejemplo y fuerza en los caminos del Espíritu. Cualquier aspecto de su vida irradia luz sobre la nuestra. En ella nos podemos reflejar como en el más claro espejo. María es excelente, sobre todo, por su actitud de fe, de confianza y la caridad.

Lectura de la Palabra (Heb 10, 23-25)

Mantengámonos firmes en la esperanza que profesamos, pues quien nos ha hecho la promesa es digno de confianza. Procuremos amarnos unos a otros para poner en práctica el amor y las buenas obras. No abandonemos nuestras reuniones, como algunos tienen por costumbre, sino fortalezcámonos mutuamente, tanto más cuanto que ya ven que el día se acerca.

Reflexión

El pueblo de Israel mantuvo su esperanza en la promesa, dada por Dios a Abrahán.
En tiempo de crisis, la esperanza alentaba los ánimos del pueblo, con la voz de los profetas.
El Mesías fue soñado y esperado.

María, hija creyente de Israel, confía y espera que las promesas se cumplirán.
María pide y llama al Liberador de su pueblo.
María permanece, como vigía en acecho, a las señales de Dios.
Su esperanza, su sorpresa, se va concretando en ella misma.
Nunca imaginó que fuera la elegida entre las mujeres.

María condensa en sí la esperanza de Israel. María no se sienta a esperar.
Su esperanza no es pasiva. Participa, llama, invoca, responde, actúa, llevada por el anhelo
de ver a su pueblo visitado por el Mesías.
De su vientre virginal brotará la Esperanza
para todos los pueblos.

María nos da hoy su esperanza, porque nos entrega a su Hijo, el esperado, el prometido.
María, vida, dulzura y esperanza nuestra.
Como María, alentamos nuestra esperanza.

Revisión de vida

- ¿Somos pesimistas ante los sucesos? ¿Por qué nos dejamos invadir por el miedo?
- ¿Nos sentimos, en momentos difíciles, abandonados de Dios? ¿Por qué?
- ¿Cómo creceremos en la espera confiada del Señor?
¿Cómo podemos superar nuestros miedos y pesimismos?

Oremos al Señor

Escúchanos, Padre...

- Para que como María nuestra esperanza esté sólidamente cimentada en ti .Oremos.
- Para que como María podamos supera el miedo y el pesimismo. Oremos.
- Para que como María nuestra fuerza la encontremos en el Señor. Oremos

Oh Dios, que nos concedes venerar a la Virgen María como Madre de la santa esperanza,
concédenos, por su intercesión, orientar nuestra esperanza hacia los bienes de arriba,
cumplir nuestra misión en la ciudad terrena y recibir un día los bienes que la fe
nos invita a esperar.