Jesús, María y José

PP. Agustinos de Montejo de la Sierra, Madrid 

Homilía

Ser "padres" es algo más complicado que tener un hijo, alimentarlo y cuidarlo... ¿Verdad? 
Y..., si añadimos las enormes presiones que viene soportando la familia desde la izquierda o la derecha, feministas o machistas, desde culturas foraneas..., desde las diversas Iglesias..., etc. etc., a través de la enseñanza..., y de los distintos medios de comunicación..., todos tirando de ella para sus propios intereses... (muchas veces enfrentados o no muy claros...), podemos decir que "ser padres", en este momento, es una tarea dificil..., que muchos "padres" no saben qué hacer...
Tal vez todo comience por ser HONRADOS CONSIGO MISMOS...
Si EDUCAR es comunicar al otro, con respeto..., lo mejor de uno mismo..., aquello que permita a los hijos llegar a ser ellos mismos ( y no "la voz de su amo"...), nadie podrá comunicar con verdad otra cosa que lo que él vive de verdad... 
La palabra más auténtica no es el "bla, bla, bla"..., o el sermoneo..., es lo que somos...
¿De que serviría que los hijos realicen, durante un tiempo..., actos, gestos, ritos..., que los padres no viven..., solamente porque "siempre se hizo así"?
¿Más claro? 
Unos padres..., honrados, educarán, con su vida..., sin palabras..., en la honradez... Unos padres solidarios, educarán, con su vida..., sin duda..., en la solidaridad... Unos padres justos, educarán..., con su ejemplo..., en la justicia... Unos padres creyentes, educarán, día a día..., con el testimonio de su vida..., en la fe...
Actitudes y orientaciones fundamentales ante la vida que los padres viven hoy de un modo y quizá los hijos vivirán de otro..., pero que transmiten de la mejor manera que ellos pueden..., desde la sinceridad de la propia vida..., sabiendo que la orientación fundamental de los hijos y su opción de fe..., sólo dependerán de ellos mismos... 
Es lo que hicieron María y José..., judíos piadosos y cumplidores que presentan a Jesús en el Templo..., honestos y consecuentes con su propia experiencia de fe..., como más tarde lo fue Jesús..., de una manera diferente y nueva..., pero desde la misma fidelidad a Dios que aprendió, tal vez sin palabras..., de sus padres...

Fuente: Paroquia Nuestra Señora de Nazaret, Madrid, España