“Hoy, el Creador de todas las cosas, el Verbo de Dios, compone un libro nuevo brotado del corazón de su Padre, y que escribe por el Espíritu Santo, que es la lengua de Dios” ( San Juan Damasceno, siglo VIII).

Padre Felipe Santos Campaña SDB

 

Comentario: María, hoy, como ayer, dejo a tu hijo Juan que haga el comentario con su palabra y sentimientos cálidos.

“...Oh Hija de del rey David y Madre de Dios, Rey Universal. Oh divino y viviente objeto, cuya belleza ha encantado al Dios creador, Vos cuya alma está completamente sometida a la acción divina y atenta al único Dios; todos vuestros deseos tendieron a Aquel que es el único que merece que se le busque y que es digno de amor; Vos no tenéis cólera más que para el pecado y para su autor.

Vos tendréis una vida superior a la naturaleza, pero no la tendréis para Vos; Vos no habéis sido creada para Vos, Vos os habéis consagrado por entero a Dios que os ha introducido en el mundo, a fin de servir a la salvación del género humano, con el fin de cumplir el designio de Dios, la Encarnación de su Hijo y la edificación del género humano.

Vuestro corazón se alimentará de las palabras de Dios: ellas os fecundarán, como el olivo fértil en la casa de Dios, como el árbol plantado al borde de las aguas vivas del Espíritu, como el árbol de la vida, que ha dado su fruto en el tiempo fijado: el Dios encarnado, la vida de todas las cosas. Vuestros pensamientos no tendrán otro objeto que lo que aprovecha al alma, y toda idea no solamente perniciosa, sino inútil, Vos la echaréis incluso antes de sentir su sabor”

Oración: María, al igual que tu gloria te vino por cumplir los designios de Dios, haz que mi vida siempre esté disponible para hacer la voluntad divina y no me deje llevar de mis antojos.

Permíteme, María Virgen, que me sienta unido a ti en esta alabanza que te ha tributado tu hijo amado Juan. Entra, María, en el jardín de mi vida, y siembra en él las flores de la alabanza. Que tu maternidad revolotee, hoy, en cuanto haga.