“Los que tienen confianza en María no se sentirán decepcionados” (D. Bosco)

Padre Felipe Santos Campaña SDB

 

Comentario: Una de las realidades que más acucian al hombre moderno, sobre a mucha parte de la juventud, es la frustración que experimentan por muchos y variados motivos. Uno de ellos es la pérdida progresiva de la fe. Cuando ésta falta, muchas cosas aparecen ante su vista sin horizonte, sin sentido, sin ilusión.

Comentan que su existencia transcurre en medio de una gran inseguridad: en lo laboral, en lo psicológico y en lo espiritual.

Se sienten, como dice una joven de 20 años, frustrados incluso después de hacer el sexo sin amor. Comenta que es un dolor y en un engaño.

Tras esta experiencia, cuenta, he vuelto a la raíz de mi fe que, sea como sea, ha sido la que me ha permitido vivir los mejores años de vida hasta que me metí en el lío de lo fácil.

Desde que he vuelto, sabía que mi confianza en María, iba a constituir una fuerza liberadora de todo apego que me esclavice. Y, desde que emprendí este nuevo estilo de vida- recuperado al menos- noto que el gozo y la alegría han aflorado de nuevo en mi ser entero.

Mi confianza en María Virgen es total. Soy su amiga y su hija y su hermana y todo. No hay tema que no le consulte cada día cuando hago una ferviente oración tranquila a sus pies, o en casa ante una imagen que me he comprado.

María, ¡qué bien sabes tú lo que me ha costado salir de ese estado frustrante! Pero gracias por haberme concedido lo que anhelaba mi corazón marchito por el placer indigno.

Oración: María, gracias porque soy de esas personas que, al estilo de san Juan Bosco, he captado el mensaje de la devoción y de la confianza que mereces por nuestra parte. Haz que, desde ahora, me sienta tan unida a ti, que jamás me vea frustrada a mis 20 años.