Creemos que María está presente entre nosotros ...

Padre Felipe Santos Campaña SDB


Texto:
“La Virgen María indicó a D. Bosco su campo de acción entre los jóvenes, y lo guió y sostuvo constantemente, sobre todo en la fundación de nuestra Sociedad. Creemos que María está presente entre nosotros y continúa su misión de Madre de la Iglesia y Auxiliadora de los cristianos. Nos confiamos a ella, humilde sierva en la que el Señor hizo obras grandes, para ser, entre los jóvenes, testigos del amor inagotable de su Hijo” (Constituciones Salesianas, artículo 8).

Comentario: Este artículo presenta a la Virgen María íntimamente vinculada a la fundación de la Sociedad Salesiana y a la vocación salesiana. La dimensión mariana es esencial en la historia y en la vida de la Familia Salesiana. Cualquiera que conozca la Obra Salesiana, sabe que la Virgen participó en el nacimiento y desarrollo de los diversos Institutos religiosos. “Puede decirse que María Santísima es fundadora y madre de todas las congregaciones desde el cenáculo hasta nuestros días, decía D. Bosco.

En particular, María es madre y sostén de la Congregación. Este artículo demuestra la presencia eficaz de María en la actividad de la Iglesia. Como dice el Concilio, María, “asunta a los cielos...,continúa obteniéndonos los dones de la salvación eterna. Con amor materno cuida de los hermanos de su Hijo que todavía peregrinan y se hallan en peligros y ansiedad, hasta que sean conducidos a la patria bienaventurada.

Me comentaba un joven educado en los salesianos: “Podré haber olvidado a los profesores, compañeros, aulas..., pero la imagen de María Auxiliadora están tan impresa en mi corazón, que no la olvido ni un solo día”.

Oración: María, esta mañana me siento tan radiante de felicidad que hasta me he emocionado al recordar mis años pasados en la escuela de D. Bosco. ¡Cuántos recuerdos de infancia y de joven se agolpan en mi mente! Nombres de compañeros, de profesores, de teatro, clases, suspensos y sobresalientes...Una maravilla! Pero, María, tú bien sabes que lo más destacado de aquellos años fue la intensa devoción que te tenía y que, desde entonces, nunca jamás la he olvidado. Puede que existan días en que me despiste, pero, en general, tú formas parte de mi vida, estás en ella vivificándola con tu auxilio.