Todo es un cántico a las maravillas que nos rodean

Padre Felipe Santos Campaña SDB

 

Texto: “La bienaventurada Virgen es el cielo que muestra el sol de la justicia, la tierra que produce la espiga de vida, el mar que da la perla espiritual...¡Qué maravilloso es este mundo! ¡Qué maravillosa es esta creación con su hermoso jardín de virtudes, con las flores olorosas de la virginidad!” ( San Teodoro, siglo IX)

Comentario: María, al leer y meditar las palabras de tu hijo y amigo Teodoro, me quedo absorto de la intensidad de su devoción para contigo. Me gusta que te llame el cielo que muestra el sol. Los que somos amantes de la naturaleza, encontramos en ella un medio para elevar nuestra mente y nuestro cariño a Dios y a ti. Ella, la creación nueva, es una imagen de vuestra presencia en nuestra vida.

Cuando tengo días tontos, me refugio en las nubes que adornan el azulado firmamento; en la variedad de colores cromáticos que presentan las flores que dan belleza y realce al universo; en el jardín rico y variado de los seres humanos que poblamos esta tierra. En unos más que en otros crecen las flores de las virtudes que son, al fin y al cabo, las que dan claridad y riqueza a nuestras almas.

Todo es un cántico a las maravillas que nos rodean. Y a veces, llevados por otros afanes distintos, no cultivamos las esencial y columnas que embellecen nuestra persona.

Quiero, como Teodoro, ser en el día de hoy un hijo y amigo tuyo que se deleita en todo los que mis ojos contemplen. No me faltará el mejor espacio del día: los minutos que paso en tu presencia, momentos en los que me relajo plenamente de todas mis actividades, encaminadas- como sabes- a hacer de mi vida una parte de esta creación hermosa. ¡Lástima que haya gente desagradable e insensible que la estropea!

Oración: María, ¡qué guapa eres! Esta mañana te veo engalanada con las flores más lindas del universo. Y me siento feliz en decírtelo con la espontaneidad que me caracteriza. Quiero en estas horas que paso en la creación, sentirla en mi interior y, al sentirla, vivir la presencia envolvente de tu corazón en mi corazón; la imagen de Dios Creador que nos llama a completar esta obra que él iniciara al principio de la creación universal. Gracias, María, sol, gozo, virtud y mi todo.